Para que tengas en cuenta... Todas las formas de vivir tu vida, de accionar, de ser tú mismo, será TU decisión. Y sino, fijate en Jorge... Sé un Águila, no un pato.
Jorge estaba haciendo fila para
poder ir al aeropuerto. Cuando un taxista se acercó, lo primero que notó fue
que el taxi estaba limpio y brillante.
El chofer bien vestido con una camisa
blanca, corbata negra y pantalones negros muy bien planchados, el taxista salió
del auto dio la vuelta y le abrió la puerta trasera del taxi. Le alcanzo
un cartón plastificado y le dijo: yo soy Willy, su chofer. Mientras pongo su
maleta en el portaequipaje me gustaría que lea mi Misión. Después de
sentarse, Jorge leyó la tarjeta: Misión de Willy: “Hacer llegar a mis
clientes a su destino final de la manera más rápida, segura y económica posible
brindándole un ambiente amigable”.
Jorge quedo impactado. Especialmente
cuando se dio cuenta que el interior del taxi estaba igual que el exterior,
¡¡limpio sin una mancha!! Mientras se acomodaba detrás del volante Willy
le dijo, “Le gustaría un café? Tengo unos termos con café regular y
descafeinado”. Jorge bromeando le dijo: “No, preferiría un refresco”.
Willy
sonrío y dijo: “No hay problema tengo una hielera con refresco de Cola regular
y dietética, agua y jugo de naranja”. Sorprendido Jorge le dijo:
“Tomare el jugo de naranja” Pasándole su bebida, Willy le dijo, “Si desea usted
algo para leer, tengo la revista Semana, Dinero, Portafolio y
Selecciones…” Al comenzar el viaje, Willy le paso a Jorge otro cartón
plastificado, “Estas son las estaciones de radio que tengo y la lista de
canciones que tocan, si quiere escucharla”
Y como si esto no fuera demasiado, Willy le dijo que tenía el aire acondicionado prendido y preguntó si la temperatura estaba bien para él. Luego le avisó cual sería la mejor ruta a su destino a esta hora del día. También le hizo conocer que estaría contento de conversar con él o, si prefería lo dejaría solo en sus meditaciones. ...
“Dime Willy, -le pregunto asombrado Jorge, siempre has atendido a tus clientes así?”
Willy sonrió a través del espejo retrovisor. “No, no siempre. De hecho solamente los dos últimos años. Mis primero cinco años manejando los gaste la mayor parte del tiempo quejándome igual que el resto de los taxistas. Un día escuche en la radio acerca del Dr. Dyer un “Gurú” del desarrollo personal. El acababa de escribir un libro llamado “Tú lo obtendrás cuando creas en ello”. Dyer decía que si tú te levantas en la mañana esperando tener un mal día, seguro que lo tendrás, muy rara vez no se te cumplirá. El decía: Deja de quejarte. Se diferente de tu competencia. No seas un pato. Se un águila. Los patos solo hacen ruido y se quejan, las águilas se elevan por encima del grupo”.
“Esto me llego aquí, en medio de los ojos”, dijo Willy. “Dyer estaba realmente hablando de mi. Yo estaba todo el tiempo haciendo ruido y quejándome, entonces decidí cambiar mi actitud y ser un águila. Mire alrededor a los otros taxis y sus chóferes… los taxis estaban sucios, los chóferes no eran amigables y los clientes no estaban contentos. Entonces decidí hacer algunos cambios. Uno a la vez. Cuando mis clientes respondieron bien, hice más cambios”.
“Se nota que los cambios te han pagado”, le dijo Jorge.
“Si, seguro que sí”, le dijo Willy. “Mi primer año de águila duplique mis ingresos con respecto al año anterior. Este año posiblemente lo cuadruplique. Usted tuvo suerte de tomar mi taxi hoy. Usualmente ya no estoy en la parada de taxis. Mis clientes hacen reservación a través de mi celular o dejan mensajes en mi contestador. Si yo no puedo servirlos consigo un amigo taxista águila confiable para que haga el servicio”.
Willy era fenomenal. Estaba haciendo el servicio de una limusina en un taxi normal.
Posiblemente haya contado esta historia a mas de cincuenta taxistas, y solamente dos tomaron la idea y la desarrollaron. Cuando voy a sus ciudades, los llamo a ellos. El resto de los taxistas hacen bulla como los patos y me cuentan todas las razones por las que no pueden hacer nada de lo que les sugería.
Willy el taxista, tomo una diferente alternativa:
El decidió dejar de hacer ruido y quejarse como los patos y volar por encima
del grupo como las águilas.
No importa si trabajas en una oficina, en mantenimiento, eres maestro, Un
servidor público, político, ejecutivo, empleado o profesionista, ¿Cómo te
comportas? ¿Te dedicas a hacer ruido y a quejarte? ¿Te estás elevando por
encima de los otros?
Recuerda:
“ES TU DECISIÓN”